
Finalmente mi amo logró convencer a Sancho de que se golpeara el mismo, sobornándolo. Por cada golpe que se daba, Don Quijote le pagaba.
Después de unos días llegamos a un salón donde encontramos a uno de los personajes del libro de Avellaneda, Alvaro. Don Quijote le dijo que publicara que era falso lo que decía en el libro.
Desde lo alto vimos nuestro pueblo natal, fue un momento nostálgico porque por mi mente pasaron todos los momentos y aventuras que pasé junto a mi amo a pesar de ser loco, y con Sancho a pesar de ser tonto.
Después de un largo fuera, llegamos a nuestra casa, a mi establo, donde todo sigue igual. Donde tengo mi cama echa de paja, donde tengo comida, donde tengo un espacio cálido.
Debo admitir que mi amo.. poco a poco... ha dejado la locura y ha regresado a ser el hombre que en algun momento fue.
Una tarde, llego un médico a ver a mi amo y dijo que no tendría muchos días mas.. a pesar de que el fue un estorbo prácticamente en todo el viaje... debo admitir que cuado murió lloré... que cuando murió , todos los momentos que pasamos juntos los recordé, que cuando murió, dejó un legado para la caballería, que segirá en mi corazón, que tengas buen viaje mi amadísimo amo.