sábado, 13 de noviembre de 2010
Que coincidencia...
Así continuamos nuestro camino a Zaragoza.
Dulcinea, y la carreta

Ya el son se estaba poniendo en el horizonte... se haci'a de noche cuando nos dirigíamos hacia el Toboso para que mi amo viera a su amada, Dulcinea. Sancho le dice que la ultima vez que la vio estaba recogiendo trigo. En el camino hablaban ellos de la fama, y a Sancho se le ocurrió que para conseguir la fama se hicieran santos y humildes , como los frailes. Siguieron hablando toda la noche.
La cuidad del Toboso se aproximaba, y era ya de noche. Entramos a la cuidad y todos los habitantes dormían así que no había mucho ruido. Mi amo mando a Sancho a buscar a Dulcinea, pero Sancho volvió diciendo que la hora no era la adecuada. Seguimos buscando el Palacio, el cual yo ya sabia que no había ninguno. Ni Sancho ni mi amo conocían a Dulcinea así que estábamos perdidos... Preguntamos a donde vivía ella pero no nos supieron decir. Sancho propuso que Don Quijote se fuera a emboscar a otro lugar mientras Sancho buscaba a Dulcinea y así fue, encontramos un lugar a dos millas donde encontramos un lugar.
Sancho vio tres labradoras que se acercaban y corrió hacia mi amo para decirle que Dulcinea era una de ellas. Las tres doncellas siguieron su camino y Don Quijote veía como lo que el creía que era Dulcinea se iba. Así nosotros seguimos hacia Zaragoza.
Íbamos de camino y Sancho empezó a hablar de Dulcinea... seguimos por media hora cuando salio una carreta por medio camino con figuras y personajes. Don Quijote le pregunto al diablo que quien era y a donde iban. Le dijo que eran de la compañía de Anglo el Malo, eran el auto de Las Cortes de la Muerte, y venían con los mismos vestidos para evitar tener que volverse a vestir. Venían un mancebo de Muerte, de soldado, de reina de Ángel, otro de Emperador y él de Demonio. Don Quijote dejo que siguieran su camino pero un desgraciado con cascabeles, me asusto así que salí corriendo y deje que mi preciado amo se cayera, y corrí lo mas rápido que pude asustado hasta quedarme sin aliento..
sábado, 25 de septiembre de 2010
Corto Descanso
Un descanso merecido para los tres.. de verdad que si. Me encanto la idea de mi amo de tomar un descanso. Justo pensaba yo en el barbero y el cura, cuando a lo lejos vi su silueta sobre el horizonte. Cuando ya estaban lo suficientemente cerca para distinguirlos me di cuenta que efectivamente eran ellos. Don Quijote los recibió y me dispuse a escuchar, no tenia nada mejor que hacer. El cura tramaba algo... le menciono algo de un rey, y mi amo respondió con una de sus locuras. Espero que mi amo no piense en volver a salir en sus nuevas '' avenlocuras'' , pero así parecía.
Finalmente, nuestros dos amigos deciden irse, pero apareció nuestro viejo.. y gordo escudero, Sancho. Don Quijote lo hace pasar, pero antes me saludo y se me acerco. Sancho le traía noticias.. todos pensaban que Quijote estaba loco y que Sancho era un tonto. No solo esa noticia le traía Sancho a mi amo, si no una mas importante, nuestras aventuras ya estaban siendo escritas en una historia por un tal Sansón Carrasco.
Sancho salio,tal y como Don Quijote se lo ordenó, en busca de Carrasco, que había publicado este libro. Cuando llego este senor, se arrodillo ante mi amo y lo primero que pense fue.. que habia encontrado otro loco. Este senor dice que nuestras aventuras son famosas por todo el mundo. Empezaron a hablar pero Sancho moría de hambre y se tuvo que ir a su casa y Don Quijote se quedo en la presencia de Don Carrasco. Cuando Sancho regreso, continuaron hablando y Sansón respondiendo las preguntas, hasta que yo relinche y Don Quijote decidió hacer otra salida, y muy adentro mio me sentí feliz por la decisión tomada por mi amo.
Ya estaba todo casi listo para partir nuevamente cuando la sobrina y el ama de Don Quijote trataban de hacer lo posible para que Don Quijote no saliera en nuevas aventuras, y como siempre mi amo defendía a los caballeros andantes. Sancho llego' después de arreglar sus problemas familiares y ya estábamos listos para partir. Sancho le pregunto a mi amo que cuanto era su salario y Quijote le respondió que en algún momento se verían premiados con una ínsula o un titulo de senoria.
Al poco tiempo llego Sansón ofreciéndose como escudero e impulsando a Don Quijote a sus aventuras, pero Sancho no le pareció buena idea y dijo que el quería seguir siendo escudero y confeso que llego pidiendo salario por su Esposa. A los tres días partimos nuevamente. Nos dirigíamos hacia el Toboso.
51 52
La historia, nos la contó el pastor, Eugenio. La historia se trataba sobre el y una doncella llamada Leandra. El pastor nos hizo saber que la belleza de Leandra lo había cautivado, y que se había enamorado de ella. Fue tanto el amor que el pastor le pidió la mano, pero tuvo tan mala suerte de que el no era el único. Ahora Eugenio tenia competencia. EL padre de Leandra le dijo que fuera ella quien eligiera a su futuro esposo. Leandra no pensó en ninguno de los dos, si no que se enamoro de un soldado, Vicente. Este desgraciado la engano y le robo. Esto le paso por entregarse a alguien que no la merecía, mientras que pudo haber terminado feliz si hubiera aceptado a cualquiera de los dos que pidieron su mano. (51)
Al fin, alguien mas conicidia con migo, con que mi amo esta loco, el cabrero. Vimos un grupo de personas vestidas de blanco que llevaban algo. Apenas vi a Don Quijote observando a esas personas se me vino a la mente que ya iba a seguir con sus locuras de caballero andante. Mi amo se subió en mi espalda, y nos dirigimos rumbo a estas personas. En ese momento sabia que iba a salir algo mal, así que no preste atención. Don Quijote enojado partió uno de los palos que llevaba un hombre. Este hombre golpeo a mi amo, que se lo merecía por andar de loco nuevamente y se cayo al suelo. Fue tal el golpe que se llevo que quedo tieso en el piso y yo no sabia que hacer así que lo toque con mi pezuña. Sancho pensó que Don Quijote estaba muerto... otro loco. Mi amo finalmente dijo que ocupaba unas vacaciones, necesitaba descansar, y yo también.
Volvimos a casa y la sobrina y su ama la atendieron.. y yo volví a mi vieja casa de madera, hogar dulce hogar. (52)
sábado, 11 de septiembre de 2010
48,49,50

Hoy no tenia nada que hacer ( como siempre) así que me decidí a escuchar una conversación, y no se imaginan lo que descubrí. Había un senor como don Quijote... bueno espero que no tan loco pero tenia algo en común con mi amo. El senor del cual les hablo se hacia llamar Canónigo y hablaba del cura de libros de caballerías, que es lo que a mi amo le encanta. Canónigo le dijo al cura que una vez escribió algunas hojas de novela de caballería pero tuvo que parar de escribir porque si no quedaría encerrado en un mundo del que no podría salir ( eso fue lo que dijo pero no tengo idea de lo que significa).
Mientras que esto pasaba, me preguntaba yo adonde estaba mi inseparable amigo el burro. Mas tarde ese día me lo encontré, y me contó que Don Quijote creía que estaba encantado por que lo metieron a la jaula, pero una vez mas Sancho tiene razón diciéndole que el barbero y el cura lo estafaron para que no siguiera de caballero andante. Pobre Sancho.. siempre tiene la razón pero Don Quijote nunca le cree. (48)
Así que el burro me dijo esto, me dio mucha curiosidad y me fui para ver que decía mi amo, pero yo no estoy tan loco como el para ayudarlo a salir de esa jaula. Cuando llegue' estos dos seguían discutiendo
Sancho le propuso una idea a Don Quijote, que lo dejaran salir para según el hacer sus necesidades. Cuando salio' , lo seguí y se encontró al hombre que les mencione anteriormente, Canónigo y este le dijo que los libros de caballería no servían para nada, que eran cuentos sin sentido. (49)
Estos dos siguieron conversando. En cuanto mi amo empezó a contarle un discurso me dio muchísimo sueno, pero luche para mantenerme despierto.
Don Quijote y Sancho empezaron a hablar de su recompensa.. pobre Sancho esta muy enganado, según el va a ser gobernador... me da tanta lastima por el. A todo esto, el discurso de mi amo me dio tanto sueno.. que decidí dejarlos a ellos dos que resolvieran su problema solo y me fui a dormir... a descansar.
miércoles, 25 de agosto de 2010

Hoy amaneció nublado, y parecía que el sol no quería salir. Parecía también que va a llover en cualquier momento, pero no llueve, y así ha estado todo el día. Estaba yo desayunando con mi amigo el burro como de costumbre cuando llego' un oidor a la venta. Se veía muy elegante, y estaba acompañado de una dama bastante joven comparada a Don Quijote. Esta dama era muy bella y mi amo pensaba lo mismo.
Pues, seguí con mi rutina diaria de comer, dormir y aguantarme a mi amo loco, y no le di mucha importancia al asunto del oidor, pero fue inevitable escuchar esto.. y quede algo sorprendido pues fue una gran coincidencia , que jamas me hubiese imaginado. Resulto' que este oidor es hermano del cautivo, y esta hermosa dama, es su hija.
Por dicha hoy no se le a ocurrido nada a mi amo, por dicha no ha echo ninguna locura y no me ha puesto en vergüenza... pero cante' victoria muy pronto. Quijote decidio quedarse despierto durante la noche, haciendo guardia a su famoso castillo. Me pregunto yo, ? Que otra locura se el ocurrirá? (42)
sábado, 7 de agosto de 2010

Pues ahora la venta esta bastante llena y como es de esperar el ventero esta feliz por la plata que consegui de aqui. Espero que esta plata la invietan bien para mantener a los caballos de todos nuestros amos que vienen a la venta.
El burro y yo notamos a Sancho algo triste, pero no sabemos porque. Don Quijote le conto a Sancho la aventura que habia tenido, donde segun el habia peleado contra un gigante y habia derramado mucha sangre, pero lo que en realidad paso fue que mi amo de lo loco que esta llego a romper los cueros de vino tinto.. y lo que el creyo ser sangre no era mas que vino.
Me pregunto si Don Quijote estara conciente de lo que hace.. si sabra que esta loco.. lo suficiente para confundir molinos con gigantes. Me pregunto si algun dia llegara a ser alguien normal... necesito de un amo que no este loco. Cuando sera el dia en que Don Quijote no se meta en lios por sus locuras. A como va todo.. estas pregutnas que diariametne me hago se alejan mas y mas de su respuesta.
Tambien me pregunto si Quijote estara algo sordo.. porque dando su discruso pegaba gritos que me permitieron esucharlo. En su discurso gritado, hablaba de los soldados. Se notaba que lo decia de corazon no se si porque esta loco o porque de verdad lo siente. Hablo de algo llamado letrado, que yo no se que es ya que mi amo no se ha tomado el tiempo de explicarme muchas de las cosas de este mundo que yo no se.
Escuche el principio de una historia, y me llamo mucho la atencion asi que me acerque mas y puse atencion. Me refiero a la historia del cautivo... su padre dividio su hacienda en tres para repartir entre sus hijos. De estos tres uno debia dedicarse a el comercio otro a las letras y otro a las armas. El que nos relato la hisotria dice que el fue el que se dedico a las armas y viajo, pero fue atrapado y hecho cautivo por un rey, el rey de Argel. Intento escapar muchas veces pero no pudo hasta que llego una dama que pudo hacer lo que el no habia podio. Le mandaba cartas, pero estaban escritas en arabe. Fue inteligente y un moro se dispuso a traducirle. Esta tambien le dio un dinero, que lo saco de la prision.
Esta historia estubo bastante iinteresante comparada a el discruso de mi amo en el que casi me duermo escuchandolo.
En fin.. ya estoy muy cansado e ire a descansar, esto es todo por hoy y espero que mi amo haga mas locuras para contarles.
(41)
sábado, 31 de julio de 2010
Huespedes significan yeguas...
Otra locura de Don Quijote.

Estaba yo descansando, como normalmente lo hago pues la vida de nosotros los caballos es muy cansada. Ya estaba a punto de quedarme dormido cuando escuche un ruido, lo primero que se me vino a la cabeza fue que Don Quijote es que esta' haciendo otra de sus locuras, y asi fue. Entro' Sancho diciendo que Quijote estaba luchando contra un tal gigante. Me dio mucha curiosidad, asi que me levante y me asome por la puerta. Cuando me asome vi al ventero golpeando a mi amo, apenas vi esto me dio mucha colera.
Despue's de todo esto, terminaron la historia. Resulta que Camila se fue con Leonela, dejando a Anselmo solo y este pobre termino' muriendo por amor...
sábado, 24 de julio de 2010
Sigue El Curioso Impertinente
Como moraleja de este enredo amoroso, hay que confiar en el amor, porque es vital para que la relación se desenvuelva como queremos. Hay que confiar en la amistad, la amistad verdadera. Y por ultimo, que los cuentos dan sueno, ahora me voy a dormir.
Lotario y Anselmo

Hoy.. no paso nada interesante.. una vida normal de caballos, excepto por una cosa que no la llamo del todo interesante, pero de lo mejor que paso hoy. Con esto no me refiero a una aventura o algo por el estilo como siempre, algo diferente.. y mas aburrido. De lo que estoy hablando es , de una historia de dos amigos. Estos dos amigos se llamaban Lotario y Anselmo, y eran muy buenos amigos según entendí. Hasta que Anselmo se caso con una llamada Camila, y porsupuesto que trajo problemas como siempre ( por eso yo no me busco yeguas para estar con ellas para siempre). Anselmo quiso probar a su mujer poniéndola a prueba con ayuda de su amigo Lotario. Esta prueba consistía en que Lotario le regalara joyas para ver si le era fiel. Primero Lotario se negó a hacerlo, pero después lo hizo, inventado conversaciones entre el y Camila, pero Anselmo se entero y se enojo mucho. Su amistad no va muy bien ahora por culpa del amor.
Esta historia me da la moraleja , que entre el burro de Sancho, y yo no se va a interponer ninguna yegua o mula.
sábado, 12 de junio de 2010
La venta nuevamente.. libros de caballería
Sancho.. otra vez miente
La verdad.. no se que va a pasar, pero si le pudiera decir a mi amo la verdad se la diría.
Sancho enfada a Don Quijote
domingo, 6 de junio de 2010
Capítulos 27, 28 y 29.

Después de todo, nos devolvimos en busca de mi amo, Don Quijote. Otra vez llevar semejante peso sobre mi espalda.. pero no me queda de otra mas que aguantarme a Sancho. Nunca me he cansado tanto, pero por fin encontramos a mi amo. Lo primero que hice después de que sancho se bajara de mi fue echarme al piso a descansar mientras Sancho y Quijote hablaban.
Nos encontramos con una llamada princesa Micomicona la cual ya se me hacía conocida. Esta le asigno una tarea a mi amo, matar a un gigante. Por desgracia, Sancho me puso unas cosas en cima y tuvimos que seguir a la tal princesa. Nuevamente nos topamos al cura, al barbero y a Cardenio. El cura le contó a mi amo que unos galeotes los habían robado, y resultó que estos galeotes eran los mismos que liberó el loco de mi amo hace un tiempo atrás.
sábado, 5 de junio de 2010
El barbero y el cura nuevamente
La carta.. mi dolor de espalda
Cardenio
sábado, 22 de mayo de 2010
Sierra Morena

Nos encaminamos hacia Sierra Morena para refugiarnos. En eso, buscando aventuras por esta sierra, nos encontramos con un cojín y una maleta que estaban bien amarradas con cadenas. Las abrieron y encontraron unas camisas, un pañuelo, un libro y unos escudos de oro, lo cual le saco una gran sonrisa a Don Quijote. Mi amo saco el libro, y lo leyó, así fue que se interesó por saber quien lo había escrito y nos dispusimos a buscarlo por esta sierra. Nos encontramos con un cabrero, y yo aproveché para hablar con algunas cabras afuera, mientras Don Quijote y Sancho hablaban con el cabrero…
Mas pedradas..

Nuestra siguiente aventura llego rápido, tan rápido cómo Don Quijote le quita el famoso yelmo o bacía a un pobre señor. Mi amo vio unos presos que iban encadenados, siendo guiados por unos hombres a caballo y a pie. Eran unos galeros que iban a trabajar para el Rey. Como siempre, Quijote mete sus narices donde no debe, por eso salimos lastimados, y esta no fue la excepción. Les preguntaron uno por uno que que había pasado para que estuvieran encadenados y era por cosas mínimas. Quijote pretendía que al liberarlos ellos le iban a dar un mensaje a su amada, Dulcinea del Toboso, pero a cambio recibimos pedradas.. la verdad yo ya estoy muy viejo para andar con este loco y sus aventuras.. Saliendo lastimado cada vez que se mete en lo que no debe.
El Yelmo del Mambrino
De pronto, empezó a llover, y Don Quijote no quiso entrar al molino de los batanes. Mi amo divisó algo que venía hacia nosotros, y como siempre invento algo. Inventó que era el yelmo del Mambrino, yo la verdad no se que es eso pero pareciera ser algo importante. Según Quijote, venia alguien sobre un gran caballo con el yelmo en la cabeza, lo que en realidad era, era un barbero sobre un burro con una bacía de azófar sobre la cabeza.
Después de esto Don Quijote se puso a fantasear junto a Sancho sobre que pasaría si se hicieran famosos y un montón de cosas mas que yo como caballo se que no pasarán nunca. Los dos se pusieron de acuerdo para trabajar duro y poder llegar a ser famosos. Si ellos trabajan duro, yo también tendré que hacerlo porque soy su mascota.
sábado, 1 de mayo de 2010
Sonidos extraños
Luces se acercan..
.jpg)
Después de tanto caminar, decidimos sentarnos a descansar al lado de un árbol, ya estaba suficientemente oscuro cuando vimos unas luces a lo lejos y que se acercaban. Ya estaban relativamente cerca. Mi amo les hizo un par de preguntas y por lo tanto los asusto, entonces uno cayo y los demás huyeron. Nuevamente le pregunto que de donde venían apuntándolos con una lanza. Este respondió que llevaban a un muerto. Después de que se fueron se pusieron a comer y no se de donde habían sacado la comida si no teníamos, y por supuesto se lo acabaron todo en una sentada, y nada para nosotros.
El ejercito de ovejas.
Salimos de la venta, con muchas energías después de haber descansado. Poco tiempo después de que salimos, vimos unas nubes de polvo y de inmediato Don Quijote pensó que eran dos ejércitos enfrentándose. Fuimos a una colina para tener una mejor vista. En eso, no se de done , Quijote saco nombres de los soldados que se enfrentaban, y se los decía a Sancho.
Pues, conforme nos acercábamos me di cuenta de que no eran ejércitos, sino rebaños de ovejas y sus pastores. Sancho le dijo la verdad a Don Quijote, pero este como buen loco se metió en la cabeza de que eran dos ejércitos.
Don Quijote decidió atacar a las pobres ovejas. Donde los pastores se percataron que íbamos hacia a ellos nos empezaron a tirar piedras, y puedo decir que si dolió. Todas las piedras iban dirigidas a mi amo, pero un par me pegaron.
Después de que termino la pelea, Sancho le reviso la boca a mi amo y Don Quijote le vomito encima y consecuentemente Sancho nos vomito en sima.
Necesitábamos comida, pero no teníamos porque a Sancho le habían quitado las alforjas, así que íbamos en busca de un lugar donde descansar y comer. Don Quijote le dio a sancho a escoger un camino.
Capitulo 17.
Vi a Sancho y a mi amo salir de su habitación nuevamente y pensé que ya nos íbamos pero No se porque Quijote se fue y dejo a su escudero solo. En eso llegaron unos bandidos y le echaron un balde de agua fría a sancho y le robaron sus alforjas.
Capitulo 16.
Estaba durmiendo y soñando con las yeguas que me había ido a perseguir cuando escuche unos ruidos extraños que venían de la habitación en donde se encontraba Don Quijote y en eso vi a todos saliendo menos a Don Quijote y a Sancho
domingo, 25 de abril de 2010
Entierro, yeguas y ventas. (13, 14, 15)
.jpg)
Como su fiel caballo, acompaño a mi amo a todo lado, y esta no fue la excepción. Nos dirigíamos hacia el tan famoso entierro. En camino al entierro, Don Quijote habló con uno de los pastores. Este le dijo que que hacía tan armado por estos lugares tan tranquilos, y que le dedicaba todas sus hazañas a su amada.
Llegamos al entierro, pero Don Quijote me tuvo que dejar amarrado afuera porque no podía entrar por ser animal. Se podía ver desde allí los muchos pastores que había, incluso se podía ver el baúl del pastor muerto. Tenia cosas blancas en sima, que parecían ser papeles. Vi que un pastor tomó uno de los papeles y lo leyó.
Pasó junto a mi una mujer muy bella, que asumí era Marcela. Logré desamárrame y acercarme cuidadosamente hacia el baúl. Pues si , era Marcela, y declaró que ella no era la causa de la muerte. Quijote la apoyó.
Después de esto, nos fuimos de el entierro, y Don Quijote decidió seguir a Marcela. En eso se me cruzaron unas yeguas muy bonitas, así que decidí seguirlas. Al parecer a ellas no les gustó mi idea, y empezaron a pegarme, los dueños al ver lo que pasaba también se dignaron a pegarme hasta que llego mi tan querido amo con Sancho, pero ellos también resultaron heridos. Decidimos buscar un lugar donde pasar la noche y descansar, y así fue, llegamos a una venta la cual Quijote decía que era un castillo.. en fin eso es lo de menos, lo que importa es que ya tenemos donde pasar la noche.
Capitulo 12.
Cabra Asada (11)

Desde antes que llegáramos al lugar donde nos acomodarían al burro y a mi, olimos ese delicioso olor a carne cocinándose. Al parecer, mi amo y Sancho olieron la carne mucho después, cuando nos acomodaban para dormir. Después de un día tan agotador venía muerto de hambre, y peor con ese olor tan delicioso. Al parecer, los pastores le ofrecieron a Don Quijote y a Sancho un poco de comida. Desde donde estábamos se podía ver perfecto. Cada vez que mordían la carne, yo me la saboreaba. Sancho no quiso comer, entonces pensé que si no quería, porque no nos traería la carne a nosotros, pero Quijote lo convenció. Al final, nos dieron dos pequeños pedazos a cada uno.. y así con nuestro estomago vacío nos acostamos.. como la mayoría de nuestros días.
viernes, 16 de abril de 2010
Batallas

Al día siguiente. Partimos Don Quijote, Sancho, su mula y yo. (La mula y yo nos hicimos amigos, es muy simpática pero solo me molesta que habla muy lento. Es bueno pensar que al fin uno tiene compañía.) Creo que no se donde tiene planeado ir Don Quijote, si no adonde nos lleve el tiempo.
El primer acontecimiento del día fue nuestra primera pelea. Nos encontramos unos molinos que mi amo confundido con gigantes y quiso atacarlos. Sancho le dijo que eran molinos pero no le hizo caso. Los tres sabíamos que eran molinos menos él. No tengo otra opción mas que seguir sus ordenes y atacar. Quijote decide atacar a unos monjes porque cree que secuestran a una mujer. Sancho trata de ayudar pero le pegan y cae inconciente. (8)
Don Quijote también tuvo otra pelea, con un señor que creo que le decían El Vizcaíno. Este hiere a mi amo en la oreja, y el de vuelta. Mi amo hace que ese señor vaya hacia Dulcinea, su amada ( ya había dicho que me cuesta mucho entender por ser animal). (9)
Esta tarde le escuche a Sancho preguntar por una isla. Según entiendo mi amo con sus locuras le ofreció a Sancho una isla por ser su escudero. Quijote le respondió que necesitaba primero ganar una batalla con un buen caballero que le dejara dinero. (10)
Sancho el nuevo escudero.

Desde que llegamos no paro de dormir. No he hecho otra cosa más que dormir. Nuevamente vi por la ventana que quisieron ayudar a Don Quijote a penas se levantó, y ¿que hay de mi? Nuevamente se olvidan del caballo.
Me despertó un calor intenso y unas llamas. Algo se quemaba, no estoy seguro que. Fui a investigar que se quemaba. El fuego no me permitió acercarme mucho pero lo que me pareció fueron libros quemándose. Libros que deduzco son de Don Quijote. No quiero ni pensar lo que haría Quijote si se enterara que quemaron sus libros.
Don Quijote se dedicó a buscar a su escudero quien lo acompañara en todas sus aventuras. También recolectó plata. Encontró a un escudero llamado Sancho. Su escudero parece un hombre muy fiel y simpático. Después de todo podemos ir en busca de las grandes aventuras sin que nos falte nada. Estamos ya listos.
Descanso.
Llegamos por fin a nuestra casa, y eso significaba solo una cosa: descanso. Ya me merecía ese descanso después de todo ese caminar. Nos encontramos con la sorpresa de que en la casa cuando llegamos estaba la sobrina de Don Quijote, el barbero y el cura.
Voy a descansar porque me siento muy cansado, creo que mi amo tiene planeado salir mañana nuevamente, la verdad no se y solo me dedicaré a descansar, veremos que pasa.
En busca de un escudero.
.jpg)
Partimos de la venta y nos dirigimos hacia nuestro pueblo. Como ya Don Quijote venía armado, solo le faltaba une escudero que lo acompañara a sus aventuras. Y por su puesto un escudero tiene que tener como movilizarse, eso significa compañía para mi.
De camino hacia nuestro hogar escuchamos unos gritos. Gritos muy extraños, y decidimos ir a echar un vistazo. Resulto que había un señor pegándole a un chiquito, lo cual me pareció muy grosero de su parte. Don Quijote hizo su primera hazaña heroica y logro hacer que le dejara de pegar.
Siguiendo por el camino nos encontramos a dos mercaderes. Don Quijote les habló de Dulcinea, pero ellos se burlaron y mi amo quiso atacar. Por desgracia yo no estaba preparado por estar desconcentrado viendo los campos entonces tropecé. Nos caímos al igual que todas las armas, y ellos destruyeron la lanza. Esto me pareció muy vergonzoso, pero después de un tiempo se fueron.
No cabe más que levantarnos, avergonzados y seguir con nuestro camino hacia el pueblo en busca de un escudero. Trataré de compensar a mi amo por el grabe error que cometí, no se como pero lo haré...
¡Por fin armado!

Finalmente y por dicha de mi amo, Don Quijote, el ventero se ofreció a armarlo. Él se veía tan feliz por ser armado finalmente y poder salir a sus aventuras como un caballero verdadero. Confieso, que la idea me empieza a gustar un poco y que estoy emocionado por todo esto de la aventura.
Quijote buscaba un lugar donde velar sus armas. Por lo general tengo entendido que se hacía en la capilla, pero en este lugar no creo que haya una. Se le ocurrió ponerlas a velar en el patio, lo cual me pareció una gran idea porque las podía vigilar de que nadie se las robara. Llegaron un par de arrieros tratando de robar lo que le pertenecía a Don Quijote, pero él no lo permitió.
A la mañana siguiente, muy temprano partimos de este lugar en busca de nuevas 4 aventuras.
jueves, 15 de abril de 2010
La venta
.jpg)
Pasaron como dos, o siete días ( cuando uno es animal pierde la noción de el tiempo a veces) y todo se había calmado. Pensé que la locura de mi amo había llegado a tal punto que se le olvidó su meta de caballero andante, pero no fue así. Yo estaba dormido y de repente escuche un sonido agudo, como de que algo se quebraba y rechinaba. Era Don Quijote caminando con su armadura. Me pego tal susto que salte, y apenas el salio por la puerta estaba listo para que se montara en mis lomos nuevamente.
Después de todo esto salimos. Cabalgamos un rato y me di cuenta de que a mi amo le faltaba algo. Como dije antes el piensa las cosas en voz alta. Pues, todo caballero necesita ser armado, y este peculiar caballero no ha sido armado. Desde que pensó eso lo sentí mas pesado sobre mi espalda. Sus esperanzas cayeron. Como fue pasando el tiempo el pensó que tal vez podía toparse con alguien en el camino que lo pudiera armar.
No solo no era un caballero andante, si no que durante el día hacía un calor terrible. Calor que debilita mis viejas piernas. Los dos, Quijote y yo estábamos muertos del cansancio, andando bajo ese sol ardiente y sin una sola nube en el azulino cielo.
Llevábamos ya bastante de caminar. Y a lo lejos vimos algo. No estaba yo seguro de lo que era, pero estaba seguro que era algo que le interesaba a mi amo, porque en seguida aceleramos el paso. Conforme nos acercábamos me parecía como una venta.
Finalmente llegamos a la venta y habían dos mujeres en la entrada, y este viejo les habló. Ellas se burlaron de el, y no le agradó. Finalmente le dieron un lugar donde pasar la noche, una especie de cama. Y a mi nada, siempre se olvidan de su fiel acompañante, pero eso es algo normal y a lo que uno se acostumbra.
Después de todo, Don Quijote seguía sin ser armado cosa que le importaba tanto.
Don Quijote.. empieza con sus locuras.

Yo soy Rocinante, el caballo inseparable de Don Quijote de la Mancha. Desde que se le metió en la cabeza esto de los caballeros andantes, no me ha dejado en paz. Un día de estos, desde donde este señor me tenia amarrado podía verlo por la ventana. Como de costumbre mi amo leía. Ha pasado tan involucrado con estos libros de caballería que se ha olvidado de mi, su caballo. He pasado hambres aquí amarrado, porque el no se da cuenta de que existo y no me da comida por andar leyendo y comprando esos libros de caballería.
Don Quijote me había comprado hace un año, de un famoso herrero de nuestro pueblo. Finalmente se dio cuenta de que existo cuando termino su último libro, y no tenia mas que leer. Se le ha ocurrido la idea mas loca que ha tenido en su vida. El viejito este se le ocurrió hacerse un caballero andante, y desde luego, no hay caballero andante sin un caballo. No comprendo cómo se le ocurrió eso, pero bueno, ya no queda de otra mas que aguantármelo en mi espalda… y aunque el sea alto pero flaco el pesa mucho. Esta última semana ha pasado limpiando sus armaduras y espadas. También me saco a dar una vuelta para entrenar, ¡ y vaya que quedé cansado! Al igual que el se hace viejo, nosotros los caballos también nos hacemos viejos.
Finalmente estamos casi listos para iniciar nuestra gran aventura, pero confieso tener miedo de lo que pueda pasar. Faltan un par de cosas por definir antes de partir. A Don Quijote, desde luego le hace falta una bella doncella de la cual se pueda enamorar y por supuesto a mi me hace falta una bella yegua de la cual enamorarme también. Quijote esta tan loco que habla solo, pero me cuesta entenderle por ser un caballo y porque habla muy rápido asi que no estoy seguro si ya mi amo tiene en mente a alguna doncella. Veremos que pasa.